Y mis brazos abiertos abrazan la nada,
esa nada misma que es frío y es no saber,
frío que me quema el alma,
frío que me quema sin dejarme renacer,
Y es no saber el momento preciso
en que el olvido plante su bandera ,
anunciándome libertad maldita que no llega,
anunciándole paz deseada a mi mente,
a mi mente que te piensa y desespera.
Si la piedad fuera piadosa y quisiera,
permitiría generosa que ya no fueras,
esa nada que abrazo y que me duele,
esa nada que es frío y que me quema.
PGR.
hermosisimo...yo tambien senti frio...lo leiste?
ResponderEliminarte espero !
beso